lunes, 18 de julio de 2016

Excelencia

No se trata de ningún título. Excelencia, según el diccionario de la RAE, es superior calidad o bondad. Eso precisamente es de lo que hicieron gala Marc Marquez y su equipo en el pasado Gran Premio de Alemania. Demostraron, aprendiendo de errores anteriores de estrategia, que fueron los más listos de la clase. Tomaron la iniciativa de cambiar de moto en el momento justo y antes que sus rivales. Si querían ganar, o simplemente subir al cajón, tenían que cambiar de moto porque de seguir en la misma situación, a buen seguro que no conseguirían un bagaje suficiente de puntos. Marc se había visto rebasado por un grupo nutrido de pilotos y el cambio era la única solución y además con neumáticos lisos. Alguien pensó que fue una temeridad, sobre todo cambiando tan pronto. Pero Marc lo tenía muy claro: la única forma de ganar era arriesgar. Llegó a rodar ocho segundos más rápido que el resto. Los demás entraron tarde y lo hicieron con mixtos. Finalmente la victoria se consumó y Márquez entró primero en meta con una diferencia de tiempo más que holgada. La excelencia de todo un equipo y un piloto brillante se lucieron en Sachsenring.
Es indudable que el avance de Marc ha sido sobresaliente. Es un piloto muy diferente al que vimos en la temporada anterior. Parece que se ha dado cuenta de que las carreras duran casi cincuenta minutos. Ya no hay que solucionarlo todo en las cinco primeras vueltas, incluso no es necesaria la victoria si el precio es demasiado alto. Después de dos títulos seguidos, parece como si los contratiempos del año pasado hubieran servido para reflexionar. Ha estado cinco veces en el podio sin estar en el lugar más alto, con lo que está claro que para ser campeón hay que buscar los puntos y eso es lo que está buscando Marc con denuedo. Ahora son cuarenta y ocho la ventaja que le separa de Lorenzo que es su inmediato perseguidor en la clasificación del mundial. Ahora se puede permitir un margen de dos "ceros", y aunque aún faltan muchas carreras en escenarios muy diferentes, está claro que irá con más tranquilidad después de la pausa veraniega. 
Es indudable que sus más directos rivales tendrán que emplearse muy a fondo y asumir más riesgos de los habituales si quieren tener opción de título esta temporada. 
Quedó meridianamente claro que sus actuaciones no fueron brillantes en Alemania. Jorge no se encontró durante todo el fin de semana. Buena prueba de ello fueron las tres caídas que sufrió en los entrenamientos y luego en carrera rodó en las últimas posiciones y debió arriesgar para intentar dar un golpe de timón que le hubiera supuesto una mayor cosecha de puntos. Pero no. Sumido en su infortunio parece como si un decaimiento total se hubiera apoderado de él y no le hubiera dejado pensar. Ahora tiene un buen número de días para meditar y todo es posible ya, que faltan nueve carreras por disputar, alguna de ellas en pistas más favorables para su Yamaha.
Por lo que respecta al otro gran rival, Valentino Rossi, estuvo a su nivel de experto en agua en los primeros compases de carrera, luego más tarde, mientras su mecánicos se desesperaban esperando que entrara a cambiar de moto, él seguía en un grupo compacto donde nadie quería entrar al pit line. Cuando por fin lo hizo fue demasiado tarde. Marquez ya se había escapado. Ni él ni su equipo estuvieron a la altura. 
Cambiando de cilindrada quiero centrarme en el malasio Pawi. En una entrega anterior de este blog, concretamente después de Termas de Rio Hondo, titulé: Pawi, ¿ha nacido una estrella?. Había concluido la ronda Argentina y fue primero destacado en una carrera en agua. A partir de ahí solo ha sumado cuatro puntos, hasta llegar al pasado domingo donde volvió a vencer con una pista totalmente encharcada. El caso de este joven asiático es absolutamente increíble. A lo largo de la historia del motociclismo hemos visto pilotos más habilidosos que otros en agua, pero llegar al punto de Pawi no es fácil de entender. Si no fuera por el agua no le conocería nadie. Un piloto que solo ha sumado cuatro puntos en siete carreras, no es para que sobresalga y los medios hablen de él. Abundando en el titular anterior no iría mal otro que dijera,  Pawi, ¿ha llegado Neptuno?


domingo, 22 de mayo de 2016


MUGELLO: GUARDAESPALDAS, CAOS Y EXCELENCIA

El Gran Premio de Italia, por unas cosas o por otras, casi nunca pasa desapercibido. La carrera que se disputa en ese magnífico valle de la Toscana tiene unas connotaciones variadas que la distinguen de las demás. La clásica invasión de pista, la arenga final de Valentino, que por cierto, este año no se ha producido, las laderas de la montaña repleta de aficionados muy ruidosos  hasta por la noche, aficionados que acampan una semana antes, etc. etc.
La primera nota de distinción fue la aparición de sendos guardaespaldas para Lorenzo y Márquez. Que yo sepa jamás ningún piloto tuvo que estar protegido para trasladarse de un lugar a otro del padock en ninguna carrera ni en ningún circuito. Y es que tanto va en cántaro a la fuente que al final los organizadores pueden temerse lo peor y quieren evitar que algún iluminado agreda a los enemigos del "Líder Máximo". Afortunadamente no pasó nada anormal y todo transcurrió por los cauces habituales. Los aficionados tuvieron el habitual comportamiento animando a sus pilotos favoritos, pero nada más. Hubo mucho humo amarillo, pitos para los españoles y pancartas que la televisión censuró. Es de esperar que acabe ya de una vez esta pesadilla y que los espectadores disfruten del espectáculo, que por cierto, en Mugello fue fantástico.
El caos se produjo en moto2. Como todos sabéis, se interrumpió la carrera por rotura de una de las protecciones de agua y aire y con buen criterio hubo que parar la manga. Hasta ahí todo normal. El follón se organizó cuando los pilotos se tuvieron que incorporar de nuevo a la parrilla. Según una nueva norma del reglamento, cuando se abre el pit line, los pilotos disponen tan solo de un minuto para salir a pista. Unos equipos lo sabían y otros no. Los miembros de Irta se limitaron a tomar nota de aquellos que se habían incorporado con el semáforo en rojo. Cuando llegaron a pista les indicaron que tendrían que salir desde el pit line  e incorporarse en las últimas posiciones. ¿Pero en cuales? A todo esto los equipos se quejaron de que los neumáticos se estaban enfriando y que en esas condiciones no se podía iniciar la carrera. Pues todos a sus respectivos boxes. Discusiones, desconcierto y lo que tenía que haber sido una transición breve, se convirtió en una hora de retraso y los miembros de Irta corriendo de un lado para otro pero sin efectividad. ¡Y eso que son la asociación de equipos, que si no! A todo esto, ¿donde estaba la dirección de carrera? Es evidente que no estuvieron diligentes ni los responsables de los equipos ni los que tienen la misión de que se cumpla el reglamento. Una más que se ha producido el desconcierto cuando hay alguna anormalidad en una carrera. 
Y después del caos vino la excelencia. En motogp tuvimos la oportunidad de presenciar una de las mejores carreras de los últimos tiempos. Los protagonistas, los de casi siempre. El duelo inicial fue patrimonio de las dos Yamaha. Lorenzo con una excepcional salida y Valentino a su rueda. Márquez se colocó tercero después de una ligera remontada. Todo hacía pensar que el de Honda se uniría a los dos pilotos de azul, pero se produjo el revés más importante de la carrera al romper el motor la Yamaha de Rossi. La carrera se quedaba sin uno de los ingredientes más importantes. La desolación cundió en los miles y miles de tifossi que estaban disfrutando con la actuación de su piloto favorito. La cara de Valentino era un poema y desde luego que no era para menos. Su segundo "cero" y además en su feudo. Salvo que una de las Ducati hiciera un milagro, el vencedor sería un español.
Jorge y Marc se emparejaron y protagonizaron una última vuelta espectacular. El de Honda necesitó coger muchos riesgos para poder superar la diferencia de motor de la Yamaha. Al final, y cuando parecía que la victoria sería para Márquez, Lorenzo se salió de la aspiración de su predecesor y entraba primero por la exigua diferencia de diecinueve milésimas.
Una lucha de poder a poder con adelantamientos arriesgados pero de una limpieza extraordinaria. Una auténtica demostración de deportividad en un circuito donde se superan los trescientos cuarenta kilómetros por hora. 
Marc declaró que nunca le había pasado esto y Jorge dijo que ya lo hizo una vez y en el mismo sitio cuando corría en dos y medio. 
Las dos marcas punteras tuvieron un resultado desigual. Por un lado, y por lo que a Yamaha respecta, Jorge rompió un motor en los entrenamientos libres de la mañana, y luego en carrera Valentino tenía que retirarse por rotura del propulsor. Dos elementos motrices rotos en la misma jornada. Fallo tremendo que se palió con la victoria, pero fue una demostración de que parece que van muy al límite. Por otro lado, y según confesó Marc, Honda ha dado algunos pasos mejorando el rendimiento aunque aún  les falta aceleración. 
La ronda de Montmeló, dentro de dos semanas, volverá a ser apasionante en una pista que a todos gusta y que los españoles tendrán el apoyo de miles de aficionados.
Me encanta que el tema de los guardaespaldas y el caos se viera superado por la excelencia de motogp con unos extraordinarios pilotos como protagonistas.

lunes, 9 de mayo de 2016

LORENZO NUEVO LÍDER

De todos es sabido que los predominios técnicos de las marcas son cíclicos. Es indudable  que en la época actual Yamaha está por encima de las demás, sobre todo de Honda, su gran rival, que en otros tiempos su superioridad fue incuestionable. Muchas veces no es cuestión de poderío económico, que también, sino dar en la tecla correspondiente y adaptar sus monturas a un momento determinado de la competición mundial. Es indudable que la marca de los diapasones se ha ajustado mejor a los nuevos neumáticos y que tras una pretemporada excelente, que fue la continuación de un año anterior extraordinario, los técnicos y los pilotos han realizado un trabajo impecable. Ver rodar a los pilotos de Yamaha y a los de Honda son imágenes muy diferentes. No hay nada más que observar como ruedan Lorenzo y Rossi, si los comparamos con Márquez y Pedrosa, y eso que este último es la finura en moto. Mientras unos hacen trazadas intachables con un paso por curva muy regular, otros se pegan continuamente con sus monturas, y si no que se lo digan a Marc que es el que más arriesga. En Honda han de hacer algo. Sus dos pilotos se quejaban amargamente tras la disputa del Gran Premio de Francia y ven con impotencia que no pueden presentar batalla al buen hacer de Yamaha. 
Los comentarios sobre los cambios de pilotos en los equipos punteros han estado en primer plano en los últimos días. Ha habido medios que han colocado a Pedrosa en Yamaha en sustitución de Lorenzo, que ya anunció que la próxima temporada estará en Ducati. Por otro lado, Viñales parece ser que tiene la llave de irse, o no, como compañero de Rossi. Si estuviera hecho lo de Pedrosa creo que Maverick no hubiera estado tan categórico ni tan seguro en unas declaraciones en el día de ayer. Viñales es un piloto en ascenso, con un talento que demostrado repetidas veces, mientras que Dani es un magnífico piloto que ya ha cumplido los treinta pero que atesora una gran experiencia. Por otro lado, Rossi, que ha firmado por dos años y que tiene un gran peso específico en Yamaha, vería con muy buenos ojos que Viñales fuera su compañero de equipo. Es seguro que en estos próximos días se resolverá la incógnita y nos centraremos todos más en la pura competición que es lo que en realidad importa a los aficionados. 
La carrera de Le Mans fue abundante en cuanto a declaraciones de pilotos. A "nuestros chicos" se les entiende mejor que a los futbolistas, aunque a algunos se les deslicen algunas melonadas con un cierto desprecio hacia el periodista que interroga. Me refiero a la contestación de Dani Pedrosa a la pregunta de qué opinaba sobre el affaire de su marcha a Yamaha. La respuesta fue lapidaria: solo digo que hoy es sábado y mañana domingo. Tremendo. ¿Habéis entendido algo? Como se puede decir una chorrada de tal calibre. Si no quiere desarrollar el tema, educadamente dice que no desea hablar de ello y que lo pospone unos días, pero no salir por los cerros de Úbeda y dejar a la entrevistadora con cara de poker, me parece bastante mal en un piloto de su experiencia. La verdad es que este chico nunca se distinguió por su delicadeza y educación con los medios informativos. Pero bueno, cada uno es como es y no va a cambiar a estas alturas de la película.
Me imagino que todos visteis la caída de Márquez y Dovizioso. Es como si formara parte de una coreografía macabra. Los dos y al unísono sin aparente motivo. Solamente la desgracia de quedar fuera de los puestos de honor. Marc vio como se desvanecía la ventaja que llevaba a sus perseguidores. A tenor de lo visto en Le Mans y Jérez, va a tener que jugársela mas de una vez para mantenerse en los puestos de cabeza de la general si no mejora su Honda. Talento hay para dar y tomar, pero la mecánica tiene que acompañar, por lo menos un mínimo exigible.
He dejado para el final la gran actuación de Jorge Lorenzo en Le Mans. Estuvo magistral rodando en tiempos muy bajos y regulares durante toda la carrera, de ahí que sacara en la entrada por meta a Rossi, que fue segundo, casi once segundos. Cualquiera lo diría después de la actuación de Jérez. Bien es cierto que la pista francesa es una de sus favoritas, pero eso no empaña una de las mejores actuaciones del piloto de Yamaha de los últimos tiempos. Ahora es el nuevo líder con cinco puntos de diferencia sobre Márquez. Quiere salir de la marca japonesa con el título en el bolsillo y con la frente alta. El legado que dejará a su sucesor será para aplicarse muy mucho.
La próxima cita será Mugello, feudo de Rossi y Ducati. ¿Oiremos de nuevo la música de viento? Creo que dependerá del resultado.


miércoles, 27 de abril de 2016

ROSSI Y BINDER, EXCELSOS.

En el pasado Gran Premio de España hubo dos pilotos que marcaron la diferencia: el surafricano Brad Binder, en moto 3, y el italiano Valentino Rossi en motogp. El primero de ellos venció su carrera partiendo desde la última posición en la parrilla, a consecuencia de una "tarugada técnica" de su equipo, mientras que el segundo, que partía con la pole, hizo una extraordinaria prueba liderándola de principio a fin. Binder es líder de la provisional y Rossi con este triunfo se quita de alguna forma el "cero" de Texas. 
Se preveía una carrera disputada en motogp, pero nuestro gozo en un pozo. Que si los neumáticos, que si el peso, que si esto, que si aquello. Una manga sosa como hace mucho tiempo que no veíamos. Se escapó Rossi y adiós. Lo que está claro es que las carreras las gana el que primero pasa por el trapo de los cuadros y los problemas puntuales hay que dejarlos en el cubo de las disculpas. Valentino marcó la diferencia en Jerez desde los entrenamientos. Bien es cierto que el único que había rodado con los Michelin en la pista andaluza había sido él en la época que las motos calzaban la marca francesa, pero claro ignoro que tendrán en común aquellas gomas y estas, a sabiendas que la tecnología avanza a marchas forzadas y en los neumáticos mucho más.
Creo firmemente que Valentino tenía una motivación suprema: quería vencer y humillar a los pilotos españoles en su casa. Y a fe que lo consiguió de forma aplastante. Su semblante cuando se quito el casco era un reflejo de su alma y además con treinta y siete años. El "abuelete" sigue yendo deprisa. Está bien este tipo de motivaciones, al margen de las meramente deportivas. Al final y a la postre son seres humanos los que se la juegan en los circuitos y es humana la forma en que cada uno elige sus alicientes para mejorar en determinado momento, siempre y cuando discurra por caminos deportivos.
Otra cosa que que alegró muchísimo es que esta vez no hubo pitidos ni silbidos en el podio. Bien. ¿Y ahora por qué no? ¿No será que en esta ocasión no estaba en lo más alto ninguno de los pitados anteriormente? En fin dejémoslo ahí y ojalá no volvamos a tener que sufrir esa música de viento que no es justa con determinados pilotos y sobre todo cuando está sonando el himno español. Me imagino que en Italia será igual aunque no gane Rossi o algún compatriota suyo.
A pesar del ladrillo en que se convirtió la carrera de motogp, espero y deseo que sea la excepción que confirma toda regla y que las siguiente sigan dentro de la norma de este campeonato.
Mi última reflexión es para Binder. Venció saliendo el último y eso dice mucho de este piloto que así conseguía la primera victoria de su carrera en el Mundial. Me acordé de Márquez en moto2. Es posible que estemos ante otro piloto con un talento extraordinario.

lunes, 11 de abril de 2016


VICTORIA DE MARC ENTRE DIMES Y DIRETES

Después de las victorias en Argentina y Estados Unidos es evidente que Marc ha aprendido la lección de la temporada  anterior. Al margen del talento que tiene, es como una esponja que absorbe todo aquello que le es necesario para mejorar. Parece ser que se ha dado cuenta de que las carreras duran cincuenta minutos y que hay que esperar para atacar cuando la ocasión sea más propicia. 
Otra materia en la que está trabajando es aquella que dice que hay que correr con la moto que tienes y optimizarla al máximo. Hay que olvidarse de que hay otras que tienen mayor velocidad punta, otras que tienen mejor paso por curva, etc. Simplemente hay que hacer el trabajo con las herramientas que tienes. Creo firmemente que Marc esta en otra órbita esta temporada. Bien es cierto que hay todavía quince carreras por delante y que pueden suceder muchas cosas, pero la aptitud que está demostrando, evidencia que estamos ante otro piloto distinto al del año anterior. Ante estos hechos estoy seguro que Honda tratará por todos los medios de mejorar la moto en aquellos apartados susceptibles de progreso.
En el Circuito de las Américas dio por cuarta vez una lección de como abordar una carrera de principio a fin. A pesar de que rodó prácticamente en solitario toda la tanda de vueltas, demostró una concentración intachable hasta que pasó por la bandera de cuadros. Un paso de gigante que lo proyecta a la primera posición de la general con una jugosa diferencia sobre Lorenzo que es segundo.
Mientras tanto hay otra vez "incendio" en Yamaha y es posible que Rossi sea el pirómano. Como todos sabéis, el italiano ya firmó dos años más con la marca de los diapasones, mientras que Jorge se resiste a hacerlo. Parece ser que el acuerdo con Ducati  está más que hecho. Por un lado Valentino decía hace unos días que el español no tenía agallas para pilotar la Ducati, pero seguramente conocedor del acuerdo con la marca italiana, ahora dice que si. Primero fue el muro, luego la dialéctica, el caso es que nunca está ocioso en nueve veces campeón del mundo. 
Lorenzo parece estar harto de que en Yamaha Rossi tenga mayor peso específico siendo  él quien ostenta el título de actual campeón. Filtra también su entorno que le copia los reglajes, hasta el punto de hacer cambios en la mismísima parrilla antes de la salida. Increíble. Ante estos argumentos y otros más que desconocemos, el caso es que Ducati parece ser el próximo destino de nuestro Jorge. También sería muy bienvenido por el cerebro del actual equipo italiano, el talentoso Gigi Dall'Igna, a la sazón "gran baranda" del equipo que estaba en Aprilia cuando Lorenzo fue Campeón del Mundo de doscientos cincuenta y que ya trabajaron juntos. Bueno creo que tampoco habrá que desestimar el suculento incremento en el nuevo contrato. La pasta es la pasta, nunca mejor dicho, cuando hay italianos por el medio.
Eso por un lado, luego por otro, está quien puede ser el posible sustituto de Lorenzo en Yamaha. Las lenguas de doble filo dicen que Rossi está hablando muy bien de Maverick Viñales. No hace falta ser un lince para saber que este jovencísimo piloto español tiene talento a raudales y que está haciendo una tremenda temporada con Suzuki, moto aún en estado desarrollo. También apuntan las malas lenguas que la sombra de Valentino en la marca de los diapasones es alargada y que tiene una gran influencia en las decisiones del equipo japonés. Pero que nadie se equivoque: Maverick, a pesar de su insultante juventud, es un hombre con una tremenda personalidad y que no lo hará a cualquier precio y revisará todas las cláusulas para ver cual es el papel de cada uno en el equipo. 
Lo que si es evidente es que ya hay temas de conversación para unos meses, pero Lorenzo se tendrá que definir en breve, se dice que Jerez puede ser el lugar donde se anuncie el acuerdo. Si es así vaya añito que se nos presenta.
Otro año más la pista andaluza tendrá muchos alicientes, pero yo estoy más en lo deportivo que no en los trajines de los dimes y diretes.

lunes, 4 de abril de 2016

PAWI: HA NACIDO UNA ESTRELLA?


La primera veza que estuve en Malasia, allá por los años ochenta, me llamó la atención la gran cantidad de gente que circulaba en motos pequeñas por todos los lados. La cilindrada de la inmensa mayoría era de cien centímetros cúbicos. Auténticas masas de usuarios que tenían la característica que casi todos circulaban con chaquetas puestas al revés. La explicación de este detalle era por los insectos que pululan por el aire, enormes por cierto, y que de no llevar dicha prenda, la ropa quedaba prácticamente para la lavadora o para la basura y como el calor por esa latitud es asfixiante la llevaban así para evitar achicharrarse. Motos que solamente había visto allí y que no existían en Europa. Por aquel entonces pensé que como era posible que con tanto vehículo de dos ruedas por la calle no hubiese pilotos malasios en el campeonato del mundo igual que había japoneses, por ejemplo. Luego ya en años sucesivos comenzaron a parecer muy discretamente en el mundial y casi siempre con etapa previa en el CEV. Y buena prueba de ello fue la actuación en Termas del Río Hondo de un chavalín malasio de diecisiete años llamado Khairul Idham Pawi.
Confieso que de las carreras que se disputaron hace unas horas en Argentina fue la actuación de este chico en su primera temporada en el Mundial lo que más me impactó. En realidad era la tercera vez que estaba en una parrilla de salida, ya que el año pasado estuvo de piloto invitado en Motorland. Además su carrera fue más meritoria al rodar en un asfalto que estaba medio seco, con lo cual rodar al ritmo que lo hizo, era labor para un piloto con un talento excepcional. Por supuesto que ganó la carrera, y de que manera. La ventaja sobre el segundo, el español Jorge Navarro, fue de veintiséis segundos. Una eternidad, si tenemos en cuenta las cortas diferencias que hay en la cilindrada de moto3. ¿Fue una casualidad? Creo que no. Un piloto que rueda como lo hizo ayer Pawi,  está llamado a figurar en ese grupo donde solo están los elegidos.
Buen ojo ha tenido Tadayuki Okada al fijarse en el malasio. Particularmente le vi con ese desparpajo solo al alcance de los pilotos con mucho talento. Trazaba, a pesar de los charcos, frenaba y hacía caso omiso a las indicaciones de la pizarra que le indicaban que fuera con calma, ya que el segundo estaba a mas de veinte segundos. Pero el, nada. A lo suyo que era meterse dentro del pequeño carenado de su Honda y dar gas con una inteligencia fuera de lo común. 
Me pareció ver en él a pilotos que hicieron grandes carreras en su primera temporada. Me vienen a la memoria Capirossi, Aoki, Márquez, Lorenzo y no demasiados más. Ha sido el primer malasio en vencer en un Gran Premio. Será también el primero en ser Campeón del Mundo. El tiempo lo dirá. De momento, candidato hay.


lunes, 21 de marzo de 2016

LUCES Y SOMBRAS EN CATAR

La primera cita del Mundial no defraudó. Había elementos suficientes para que se cumplieran las expectativas. Si en algún circuito hay que hablar de luces, ese es Losail. ¡Anda que no hay focos! Y lógicamente, donde hay mucha luz también hay sombras. 
Con tanta luz me he venido arriba y creo necesario recalcar lo mejor del gran premio: la extraordinaria actuación de Jorge Lorenzo. Según comentó el mismo, fue una de las tres mejores actuaciones de su vida y creo que es verdad. Mejor tiempo en entrenamientos, buena salida, supo esperar y lanzar el ataque definitivo cuando la ocasión lo requería. Según mi criterio no tuvo ningún fallo. Una victoria muy trabajada desde el semáforo hasta la bandera de cuadros. Toda la maniobra previa de su compañero de equipo y sus secuaces para desequilibrarlo fueron inútiles. Jorge demostró una puesta a punto mental de gran nivel. Supo mantener el primer lugar que tenía en la parrilla hasta que llegaron las Ducati de Iannone y Dovizioso y le levantaron las pegatinas en la recta de meta con una velocidad punta que ya habían demostrado en las tandas de entrenamientos, muy superior al resto de las marcas. Pero supo esperar. Las carreras son largas y no hay que precipitarse. Iannone se fue al suelo y Dovizioso cayó como fruta madura. Jorge se volvió a poner al frente de la carrera y así hasta el final con un ritmo demoledor y récord del circuito incluido. 
También me gustó mucho la actuación de Márquez. Está claro que Losail no es de sus circuitos predilectos y también se notó que el conjunto piloto-moto ha de mejorar, pero creo que están en la buena senda. También ha aprendido a esperar. La pasada a Rossi fue antológica y el italiano tuvo que conformarse con ver el colín de su moto durante toda la carrera. Llegó a rebasar a Dovizioso, pero el de Ducati retomó la segunda plaza, debido fundamentalmente a la velocidad punta de su moto. Gran trabajo de Ducati en ese aspecto. 
En líneas generales se puso de manifiesto en carrera todo aquello que se vio en la pretemporada y en las tandas de entrenamientos, toda vez que la reglamentación iguala, dentro de un orden, unas motos y otras. Esto solo ha hecho que comenzar y las expectativas están a gran altura.
Como ya sabéis Michelin es la nueva marca de neumáticos en motogp, y según mi criterio, su puesta en escena ha sido extraordinaria. El aspecto de las gomas en el corralito era muy bueno y no había demasiada degradación. 
Pero hay mas luces. Hay un cañón llamado Maverick Viñales que brilló en los entrenamientos cumpliendo sobradamente sus resultados de la pretemporada. Luego en carrera las cosas no le salieron bien y concluyó en la sexta plaza. Pero que nadie se alarme, este chico está llamado a grandes gestas  aunque su Suzuki aún no esté al nivel de sus hermanas japonesas.
En el capítulo de sombras hay que destacar, otra vez, la incompetencia de la dirección de carrera. Penalizaron a siete pilotos de moto2 por haberse adelantado en la salida, cuando en realidad y según manifestó entre otros Alex Márquez, fue un fallo del semáforo que alteró la salida de los pilotos punteros de la categoría intermedia. A seis de ellos - Zarco, Rins, Lowes, Nakagami, Mulhauser y Schrotter - les hicieron pasar los la calle de los boxes. Pero lo más sangrante fue lo del italiano Morbidelli que estuvo luchando por la victoria hasta el final y le pusieron una penalización de veinte segundos por lo mismo que a los otros, con la diferencia que este se la estuvo jugando hasta el final. ¡Ya está bien!. La Federacion Internacional tiene que hacer algo porque si no los tres "genios" que forman ese comité, van a estar haciendo de las suyas toda la temporada. Hay muchas veces que hay algún piloto que se  adelanta en la salida fruto de los nervios, pero que haya mas de media docena que lo hagan a la vez,  no es normal. Deberían haber investigado el motivo del múltiple movimiento antes de esa decisión tan arbitraria.
Mira por donde Valentino se quedó fuera del cajón, fruto de no tener el ritmo suficiente, cosa que reconoció el mismo al término de la carrera, pero los suyos no se resignaron y le dedicaron a Jorge y a Marc una sonora pitada cuando estaban en el cajón. ¿Es posible que vayamos a estar así toda la temporada? Otra de las sombras que se proyectaron en la pista del desierto catarí.

martes, 15 de marzo de 2016

VOLVER A EMPEZAR


Parece que fue ayer cuando el Circuito Ricardo Tormo de Valencia ponía punto final a la temporada 2015 del Mundial de Motociclismo. Pues si, parece que fue ayer pero han transcurrido casi cinco meses. La temporada terminó con aquella guerra soterrada de Rossi contra Márquez, contra Lorenzo y contra el mundo. Los sucesos de Sepang y toda la verborrea que lanzó el gran piloto italiano. Armas arrojadizas en todos los medios habidos y por haber, en prensa, radio y televisión. Creyó que él era el mundial y que allí se hacía lo que el disponía y en parte tenía razón, porque después de los acontecimientos en la pista malaya, lo que tenía que haber sido una descalificación en toda regla, se quedó en una sanción menor.
Pero no se quedó solo en un calentón propio de tantos y tantos sucesos deportivos, no, ni mucho menos. Periodistas italianos llegaron hasta el mismísimo domicilio de los Márquez para seguir con el acoso programado por el entorno de aquel que había perdido el mundial. Siguieron los medios erre que erre, e incluso el tema llegó a los medios políticos italianos.
Pero bueno aquello parecía que era agua pasada, pero a tenor de lo leído recientemente, parece ser que Valentino y su guardia pretoriana, atacan de nuevo a pocos días del comienzo de una nueva temporada. El objetivo no puede ser otro que el de amedrentar a Márquez o al que se tercie, y atención porque esto puede ser también un mensaje para Jorge. 
Como los ataques del final de la pasada temporada le produjeron buenos dividendos en Italia, pues nada a calentar el ambiente patrio antes de que se enciendan las luces de Qatar.
Estoy convencido que los españoles implicados sabrán que es lo que hay que hacer y deben huir de cualquier provocación fuera de la pista. Sin embargo en el asfalto, en lo negro, deben ir a cuajar la mejor actuación posible. Mientras tanto el 46 y su entorno seguirán lanzando sus dardos envenenados por si aciertan y su ídolo sigue siendo protagonista en los medios informativos.
Faltan unas horas para que se inicie la nueva temporada y las espadas están en todo lo alto, en un mundial que tiene nuevas reglas con el ánimo de igualar las fuerzas en motogp. Ahora lo,importante es que los protagonistas hablen de motos, de carreras, de técnica y no de odios pasados y manifestaciones públicas llamadas a volver la vista atrás.

domingo, 8 de noviembre de 2015


JORGE LORENZO,JUSTO CAMPEÓN

En pocas ocasiones una carrera de motos había generado tanta expectación. Recuerdo la carrera de quinientos en Brasil en el año 1999 cuando Alex Crivillé se proclamó campeón del mundo, el primer español en conseguir el entorchado en la categoría máxima. En aquella ocasión la audiencias de televisión se dispararon y ya se habló de motociclismo a nivel de bar. Pero entonces todos estábamos en el mismo bando. Todos deseábamos la victoria del piloto español. 
Creo firmemente que la carrera celebrada en el Ricardo Tormo de Cheste ha superado con creces las expectativas de aquella ronda brasileña. Se decidía el titulo de motogp y no todos los aficionados deseaban la victoria de Lorenzo, que era uno de los candidatos junto con Valentino Rossi. Así como lo oyen. En el podio del circuito valenciano se oyeron abucheos cuando Jorge Lorenzo levantó el trofeo como vencedor de la carrera, y como consecuencia, nuevo Campeón del Mundo. Que pitaran los italianos, lo puedo llegar a entender, pero que lo hicieran aficionados españoles y en España, la verdad es que me cuesta mucho comprender esta actitud tan extraña. De todos es sabido la ingente cantidad de partidarios que tiene Rossi por todo el mundo y nuestro país no es una excepción. ¿Cómo es posible que se abuchee a un deportista español en España después de conseguir un Campeonato del Mundo de forma absolutamente deportiva venciendo la carrera además?
Es indudable que Valentino se había encargado de calentar el ambiente desde aquellas declaraciones previas a la carrera de Malasia. Luego vino el recurso ante el Tas e insinuaciones continuas acerca de la supuesta ayuda de Marc a Jorge. En Valencia hubo un pacto propiciado por los rectores del campeonato acerca de  no hacer declaraciones fuera de las meramente deportivas y relativas a la carrera del domingo. Y así fue, pero tras la disputa de la carrera la artillería verbal volvió a hacer acto de presencia. El tirador, el de siempre: Rossi. En una rueda de prensa en las instalaciones de Yamaha en el el circuito arremetió de forma vergonzosa contra Marquéz, contra Lorenzo, contra Honda, contra el campeonato y contra todo bicho viviente. Llegó a decir que Marc fue el guardaespaldas de Jorge. Todas estas declaraciones ante la prensa italiana que jaleaba y aplaudía todas y cada una de sus declaraciones. Aunque quería aparentar tranquilidad, la realidad era muy distinta. Pequeños sorbos de agua continuamente, denotaban que la procesión iba por dentro. Apoyaba sus aseveraciones en que Márquez en ningún momento hizo intención de rebasar a Lorenzo, algo ajeno totalmente a su filosofía de pilotaje.  Por otrto lado Marc ya había explicado angte los micrófonos y las cámaras el motivo de haber sido sólo segundo.
Nunca había visto a Valentino de esa guisa y lo conozco desde que llegó al CEV, sus primeras carreras internacionales antes del mundial. Siempre fue un tipo extrovertido de puertas afuera, aunque para dentro la actitud no era la misma. Arremeter de la forma que lo está haciendo en las últimas semanas solo denota nerviosismo y que para adjudicarse su décima tenía que tomar otra serie de decisiones para avisar a sus rivales que es casi intocable. Que no se le ocurriera a nadie ponerse por medio. Tristes decisiones cuando lo tenía más a favor que Jorge. Cuando todos creíamos que la veteranía es un grado, en el caso del piloto italiano, parece ser que ha sido al revés. Ha culpado a supuestas alianzas de los españoles su estrepitoso fracaso en la última fase del campeonato y esto ha propiciado que su compañero, uno de sus grandes rivales, se haya proclamado Campeón del Mundo con todos los honores y merecimientos.
Lo mejor de todo es que Jorge Lorenzo ha conseguido en Cheste su quinto título mundial con un circuito repleto y con muchos espectadores a través de la pequeña pantalla. En un año que parecía que no íbamos a tener ningún campeón, la buena temporada de Jorge le ha otorgado una recompensa muy merecida y con solo con la ayuda de su marca y su equipo. Eso de que el título se lo debe a la ayuda de Marc, es solo la pataleta rabiosa de un gran piloto que no ha sabido perder.
A Lorenzo y a Rossi les queda, por lo menos, un año más de ser compañeros en Yamaha. Buena papeleta le queda al Jefe de Equipo, el británico Jarvis. El ambiente se podrá cortar con espadas bien afiladas. Valentino ha sido el protagonista de una película que bien podría llamarse.:Buscando la décima desesperadamente. 

sábado, 31 de octubre de 2015

EL AFFAIR DE LA PATADA, UNA OLLA A PRESIÓN

Es lamentable pero cuando todos creíamos que el asunto de la patada de Rossi se había quedado en Sepang, resulta que cada día aparecen nuevas noticias propiciadas por la guarda pretoriana que rodea a Valentino. Es evidente que se mueven y además bien. 
En Italia Rossi fue la víctima. Pancartas descomunales en los campos de fútbol pidiendo tibia y peroné. Hasta el Primer Ministro de Italia ha dado ánimos al cuarenta y seis. Pobrecito. ¿Pero esto qué es? Parece que todos han olvidado que el que se fue al suelo fue Marc y el autor de la agresión fue Valentino. 
Ayer llegaba la noticia de la reclamación de Rossi al TAS, tribunal deportivo con sede en Suiza, pidiendo la anulación, o en el peor de los casos, el aplazamiento de la sanción. Impresionante sutileza. De esa forma en Valencia saldría en las primeras posiciones y los cuatro puntos del carné quedarían para la temporada que viene. Claro que todo esto no ocurriría si la dirección de carrera no hubiera mostrado su tibieza en Malasia y se hubiera cumplido allí la flagrante sanción antes del término de la carrera. Dorna y la FIM deben estar satisfechos.
No me extraña que Repsol, uno de los patrocinadores más importantes del mundial esté cuestionando su continuidad en el motociclismo. Con pucherazos de este estilo no es un escenario muy recomendable para una multinacional tan importante como la petrolera española.
Pero aún hay más. Por si todos estos esperpentos fueran poco, también ayer unos periodistas de Mediaset Italia fueron a acosar a Márquez en su intimidad de Cervera y se metieron en su garaje para incordiar a él y a su familia. ¿Se puede ser más mezquino? Seguro que toda la corte celestial de Valentino estarán más que orgullosos de como se están sucediendo los acontecimientos. Solo falta ya que haya un desembarco masivo de tifossi en Valencia para proteger al inocente Rossi y que los altos estamentos del motociclismo les pongan una alfombra roja al igual que a su piloto para escalar posiciones y que llegue a la cabeza de carrera sin problemas, siempre y cuando se mantenga la sanción de salir el último de la parrilla.
Espero que en Valencia solo triunfe el deporte y que sea una matinal de carreras fantástica y que los partidarios de uno y otro desfruten y se coman los bocatas en paz. Habrá que huir de las provocaciones que sin duda habrá, pero no por parte de los aficionados, siempre lo mejor del mundo de la moto, sino de los prebostes que enturbian y enfangan lo mejor de nuestro deporte.

domingo, 25 de octubre de 2015

EL ÍDOLO CAÍDO

El italiano Valentino Rossi es el piloto que más adeptos tiene en todo el mundo y España no es una excepción, estando a la par con los pilotos españoles más laureados. Pero hoy a la mayoría se les ha caído el ídolo del pedestal después de la acción más antideportiva de los últimos tiempos.
 Los aficionados al motociclismo hemos estado toda la semana pasada relamiéndonos del grandioso espectáculo que supuso la carrera de Australia. Una tremenda demostración de deportividad que nos ofrecieron los principales protagonistas de este campeonato y que concluyó con la victoria de Marc Márquez. Hasta aquí todo correcto, pero el jueves, cuando ya estaban todos los equipos en Malasia y después de la habitual rueda de prensa, Rossi declaraba que en Australia Márquez había ayudado descaradamente a Jorge Lorenzo, el otro candidato al título. Algo que no se entiende, pero así comenzaba a calentar el ambiente el veterano piloto de treinta y seis años. Y no se entiende porque si hubiera intentado ayudar a Jorge no le hubiera pasado cuando faltaban dos curvas para el final. 
No cabe duda que esas declaraciones de Rossi no tenían otro motivo que desestabilizar a Márquez y advertirle que se estaba jugando el campeonato. Al circuito de Sepang llegaron con once puntos a favor del italiano y a falta de dos carreras por disputar (cincuenta en juego) era una diferencia asumible por parte de Lorenzo.
Una vez comenzada la carrera se escapan Pedrosa y Márquez seguidos de Rossi y Lorenzo. Pronto este último da buena cuenta de su compañero de equipo y se coloca segundo con lo que se quedan Marc y Valentino emparejados y comienza un duelo que se saldó con el español en el suelo después de una de las acciones más antideportivas que he visto nunca. Fue una reedición de las carreras disputadas en Argentina y Holanda donde el duelo entre ambos se saldó con Marc en la gravilla, después de otra acción antideportiva en Termas de Rio Hondo, mientras que en Assen el italiano se saltó la última chicane antes de meta superando a Marc. En ninguna de estas dos ocasiones pasó nada y la dirección de carrera vio  todo normal. El  momentazo de hoy llega en la séptima vuelta cuando en una de las múltiples pasadas, y teniendo Rossi el lado bueno, se abre y propicia que Márquez se vaya hacia el exterior de la curva, justo el lado más sucio y donde hay menos tracción. Pero no contento con eso, le propina una patada y es cuando Marc se va al suelo.
Al margen de esta reprobable actuación del piloto italiano, lo peor de todo, ha sido el cinismo del que ha hecho gala en una declaración posterior, aseverando que no hizo nada antideportivo y que desde el plano del helicóptero se ve claramente que no le propina una patada. Pues precisamente desde esa toma es donde mejor se puede apreciar que lo que dice es mentira.
Márquez, por el contrario, quiere que todo esto concluya aquí y que este tema quede zanjado. También declaró que dicha patada le oprimió la maneta del freno delantero y que ese fue el motivo de la caída.
Rossi ha sido sancionado con tres puntos en su carnet, que sumados a uno que ya tenía, en Valencia saldrá en el último lugar de la parrilla de salida. Una multa bastante leve teniendo en cuenta que por su antideportivismo, el piloto victima de su acción se fue al suelo y se pudo hacer mucho daño. Este es un deporte de riesgo y una acción de esta naturaleza puede hacer peligrar seriamente la integridad física de los pilotos.
Ahora son siete puntos el bagaje de Rossi sobre Lorenzo y en el Circuito Ricardo Tormo todo puede suceder. El italiano tendrá que rebasar a veinte pilotos hasta llegar a la cabeza y allí teóricamente ha de estar Jorge con Marc y Dani. Aunque es este un circuito que no le gusta a Valentino, es de esperar que en cuatro o cinco vueltas este dentro de los cinco primeros y todo puede suceder, ya que ahora son siete puntos la distancia que separa a los dos candidatos al título.

Dentro de dos semanas la solución y además en terreno español donde esperamos una carrera limpia sin incidentes y donde el público animará a los nuestros. 

lunes, 19 de octubre de 2015

UN MISIL LLAMADO DUCATI


Me imagino que todos, o casi todos, visteis las carreras de Australia a través de las diferentes fórmulas de televisión. Si acaso no fue así, no sabes lo que te perdiste. La carrera de motogp que se disputó en Phillip Island fue uno de los espectáculos motociclistas mas fascinante de los últimos tiempos. Sobre todo la última vuelta, cuyo protagonista fue el de casi siempre: Marc Márquez. 
La película de carrera tuvo cuatro estrellas que nos dejaron boquiabiertos. Jorge Lorenzo, Valentino Rossi, Marc Márquez y Andrea Iannone. Ellos interpretaron su mejor actuación de la temporada en la pequeña isla al sur de Melbourne. Se pasaron y repasaron con una limpieza extraordinaria. El único toque directo lo protagonizó una pobre gaviota, de las muchas que hay en la zona, al colisionar con la moto de Iannone, hasta el punto que le hizo un agujero en el carenado. No quiero ni pensar lo que hubiera ocurrido de impactar en algún punto del cuerpo del piloto, ya que un pajarito de estos pesa, por lo menos, dos kilos. 
Motociclismo de gran nivel en un circuito muy complicado por su situación y por los cambios de temperatura que hay en los diferentes puntos del trazado. No es lo mismo estar casi tocando las aguas del Mar de Tasmania, que estar en la curva que da paso a la recta de meta. Además en esta época del año, primavera en la zona más húmeda Australia, suele llover bastante, aunque en esta ocasión la lluvia se tomó el día libre. Menos mal, porque de haber habido agua en la pista hubiera sido el colmo.
Valentino llegaba a Phillip Island con dieciocho puntos de margen sobre Jorge, una diferencia, que habiendo setenta y cinco en juego, no es demasiado importante. Los dos pilotos de Yamaha se vigilan ahora mucho más que durante todo el año. Para ellos los demás son figurantes en esta gran producción, pero que en determinadas escenas van a cobrar una relevancia fundamental para el desarrollo de la superproducción, tal como vimos el pasado domingo. 
A los pilotos de Honda solo les vale ganar y a los de Ducati lo que les dejen, algún cajón que otro. Pero todos ellos pueden ser jueces en la lucha por el título. Ayer en Australia dejaron bien patente que tienen mucho que decir en ese juicio que verá su última vista en el Ricardo Tormo de Cheste. Marc se impuso a Jorge y Andrea a Valentino. Ni uno ni otro practicó el paisanaje al no facilitar las cosas a su compatriota. Al final y a la postre, Márquez le restó puntos a Lorenzo y Iannone a Rossi. En esta lucha  el beneficiado fue Jorge que le arrebato siete a su compañero de box. Ahora son once y cincuenta en juego. Nos esperan dos carreras para verlas con el cinturón de seguridad bien apretado en el sofá delante de la tele.
Pero volvamos a Phillip Island. Ducati dejó bien patente que su velocidad punta es infinitamente superior a las otras marcas. Repetidamente la moto de Iannone, sin aspiraciones, pasaba al resto como si fueran parados, para desesperación de sus rivales. Sobre el papel la más lenta fue la de Rossi, de ahí su frustración. Al italiano de Ducati no le importaba perder un lugar en otro punto consciente de su superioridad en la recta de meta, aunque hay que destacar en su beneficio que de una tacada pasó a Marc y a Valentino en la misma pasada. 
Y qué decir de la última vuelta de Márquez. Hacia mucho tiempo que no veía una cosa igual, y me imagino que a vosotros os ocurrió algo parecido. Cuando ya se cantaba la victoria de Lorenzo, y a falta de muy pocos metros, Marc hizo magia. Se sacó de su chistera un tiempo imposible y en pocos metros pasó de tercero a primero ante el asombro de propios y extraños y al propio Lorenzo que ya casi estaba levantando la mano para festejar la victoria, le robó la cartera en el último viraje. Vaya tela de vuelta. Increible. Jorge vio con desesperación que la victoria se esfumaba, y lo peor, cinco puntos menos que le quitaba a Rossi.
Lorenzo, aunque algo frustrado, no escondía su alegría por esa resta de puntos y declaraba que había pilotado con mucha prudencia ya que no quería caerse por nada del mundo. Y digo yo: cuando se está en situaciones límite ¿no hay que arriesgar para conseguir la meta soñada? Creo que, a pesar de esa vuelta de otro mundo de Marc, Jorge pudo haber hecho algo más,  ya que su ventaja era importante y estábamos en las postrimerías del último giro y había que darlo todo y más.
Análisis al margen, lo cierto es que el madrugón, o acostarse más tarde, mereció la pena por el tremendo espectáculo que nos ofrecieron estos cuatro grandísimos pilotos. Por cierto, ¿y Pedrosa donde estaba? Es posible que le afectara la humedad tremenda de Phillip Island y no pudiera completar un trío de actuaciones memorables, despues de la épica de Alcañiz y Motegi. En fin, siempre nos quedarán Malasia y Valencia.
Otro que no brilló fue Andrea Dovizioso, compañero de Iannone que terminó décimotercero. También está claro que el otro Andrea, Iannone, ha dejado marginado, por el momento a su colega que cabalga sobre la misma moto.
La próxima cita sera la pista de Sepang en Malasia, un circuito de los más anchos del mundial pero que tiene el inconveniente que llueve casi todos los días por la tarde. Sería bueno que el agua esperara hasta las tres de la tarde hora local, para poder presenciar un espectáculo motociclista como el que vimos en Australia. No me extraña que las entradas para Cheste estés agotadas. ¿Quien querrá perderse el desenlace si llegan al Ricardo Tormo casi empatados y un español, Jorge Lorenzo, puede proclamarse Campeón del Mundo? Mientras tanto paladeemos el exquisito manjar que nos ofrecieron ayer en Phillip Island


lunes, 12 de octubre de 2015

¿PODREMOS SOPORTAR UN  AÑO SIN TÍTULO?

He oído en ocasiones que el Mundial iba a perder interés a nivel internacional, si siempre, o casi siempre, ganaban pilotos españoles. Por si fuera poco, se disputan cuatro GGPP en nuestro país, hecho insólito en toda la historia de este deporte. Yo nunca estuve de acuerdo con esa aseveración, ya que si los nuestros se llevaban los triunfos, es porque son muy buenos. Y si hay en España cuatro carreras puntuables es porque los aficionados acuden masivamente a los circuitos. Así por lo tanto, si somos una potencia en el motociclismo es porque nos la hemos ganado.
Pero, ¿qué pasaría si algún año, como puede ser este, nos quedamos sin entorchado? Creo que los "quemaos", sobre todo los jóvenes, no lo encajarían bien. Indudablemente sería un golpe fuerte y seco. 
Pero no adelantemos acontecimientos ya que el más importante, el título de motogp, todavía no está decidido y puede inclinarse a favor de Lorenzo, cuando faltan aún tres pruebas por disputar y setenta y cinco puntos en juego, en cambio el de moto3 está ya casi en poder del británico Dany Kent y el francés Zarco ya se proclamó Campeón en Motegi por la lesión de Tito Rabat. 
A la hora del análisis, en este momento concreto de la temporada, hay que ser conscientes que los tres pilotos españoles de motogp candidatos al título por palmarés, por talento y por moto, han fallado estrepitosamente, aunque cada uno haya brillado y mucho en determinados momentos. 
Marc Márquez era el gran favorito, sobre todo después de las dos temporadas anteriores donde arrolló. Pero nuestro gozo en un pozo. Con aquello del la nueva moto, volver al chásis del año pasado, mas otros problemas provenientes de la ansiedad que tiene este gran piloto, han derivado en el hecho de que mediada la temporada tenía escasas probabilidades de victoria final. Cinco ceros y en tres ocasiones no subir al cajón, son números muy negativos para revalidar el título. Cuando todos creíamos que Marc había aprendido la lección de que las carreras son largas y hay que saber esperar, pues nada, sucede, además en Aragón, que las prisas vuelven a apoderarse de la voluntad del piloto de Honda. Como es un chico muy sincero, pidió disculpas a los aficionados y sobre todo a los miembros de su equipo. Está bien disculparse pero hay que poner los medios necesarios para que no vuelva a ocurrir. Esta es la lección que hay que aprender, pero ya este examen está suspendido y habrá que esperar al curso que viene para poder llegar al sobresaliente cum laude.
Lo de Pedrosa es para analizarlo con un grupo de psicólogos. ¿Alguien presagió la actuación de Dani las dos últimas carreras que se han disputado, a tenor de como había transcurrido la temporada? Confieso que yo, no. Tras la disputa de la carrera de Catar decide que se tiene que operar de ese mal que aqueja a muchos pilotos que el dichoso síndrome compartimental. Eso, repito, le puede pasar a cualquiera, pero bien pudo haberlo hecho durante la pretemporada y no esperar a que el campeonato comenzara. Pelillos a la mar. Se perdió tres carreras, incluida la de Jerez. Alguna visita al podio y por fin llegó Aragón. Debido a mi edad he visto todas, o casi todas las carreras de Pedrosa en todas las cilindradas y confieso que nunca le había visto una actuación como esa. Superó al correoso Rossi hasta en seis ocasiones y finalmente entró en meta por delante del italiano que no tuvo más remedio que tirar la toalla. Chapeau, si señor. Luego en la siguiente, la que se disputo en el día de ayer en Motegi, nuevamente sobresaliente y esta vez con victoria. Además en casa de Honda, casi nada. Pero muchos nos preguntamos: ¿por qué al final de temporada esta demostración de talento y valor? Es  como si se hubiera transfigurado o el Dr Ángel Villamor, el traumatólogo que le operó, le hubiera puesto en el brazo del gas un chip maravilloso, eso si con cierto retardo, y nos hemos encontrado con un Dani estratosférico que nos ha hecho vibrar en estos últimos compases del campeonato. Espero y deseo que esto me lo explique alguien algún día, aunque si he de ser sincero, lo que más me gustaría es que esa magnífica racha le dure muchos años para disfrute de todos los aficionados al motociclismo.
He dejado para el final al piloto que nos puede dar la alegría final: mi admirado Jorge Lorenzo. Antes que nada le recomendaría un cambio de marca de casco, ya que como todos sabéis, ese protector ha sido el causante de dos fiascos clamorosos. Otro fallo, que no el azar adverso, fue el que le privó de la victoria en Motegi y de esta forma reducir los puntos que le separaban de Rossi. El neumático estaba para los leones y por eso tuvo que ceder ante el empuje de Dani  y Valentino. Ellos dos lo conservaron en previsión de que al final las gomas no iban a estar para muchas alegrías, pero Jorge sin embargo, prefirió tirar y distanciarse y ahí es donde se produjo la debacle. De haber vencido con comodidad, debido a su tremendo ritmo, pasó a ser tercero y por los pelos. Jorge declaró, y con razón, que si el vence las tres carreras que faltan por disputar y Rossi no hace tres segundos, será campeón. Verdad inapelable pero no será fácil que se produzca, sobre todo teniendo en cuenta la calidad del rival. Para aprobar el curso hay que estudiar durante todo el año y no dejarlo para la noche antes del examen. Ahora vienen las prisas y necesitará fuego amigo para reducir y superar la diferencia de puntos sobre su compañero de box. Tarea difícil, pero no imposible, ya que después del empuje de Pedrosa y alguna carta que tenga en la bocamanga Márquez, serían los ingredientes necesarios para facilitar la labor de Jorge y así no quedarnos sin el título nuestro de cada año.

domingo, 27 de septiembre de 2015


PEDROSA FRENA A ROSSI Y DA OXÍGENO A LORENZO


Confieso que hace muchas carreras que no veía a Dani con la furia, el empuje y la determinación que ha demostrado en la ronda que se ha disputado en Motorland. Antes de la disputa de la prueba aragonesa, tan solo dos podios (un segundo y un tercero) llevaba el piloto de Honda en su haber a falta de cinco carreras para la conclusión de la temporada, aunque bien es cierto que ha habido una intervención quirúrgica por medio. Con todo y con eso, no recuerdo a un Pedrosa tan fuerte en el cuerpo a cuerpo y sobre todo, con un piloto de la talla de Valentino Rossi, duro hueso de roer donde los haya, cuando se trata de rozarse los codos en la disputa por salir primero de un viraje. Dani siempre había huido de ese tipo de situaciones, pero en Alcañiz fue todo un coloso. En seis ocasiones, cuando la carrera llegaba al final y Rossi, que se había mantenido a su rueda gran parte de la carrera, decidió que era el momento de dar el hachazo definitivo, se pasaron y repasaron y ante un ataque de Rossi, Dani respondió con otro mayor. Al final el italiano tuvo que rendirse ante un Pedrosa absolutamente imbatible y el, que es un veterano con mucho talento, optó por dejar los ataques para una ocasión más favorable aunque se dejara cuatro puntos más en la diferencia que le separa de Lorenzo. 
Ante esta demostración de poderío y arrojo de Pedrosa, me pregunto¿ porqué ahora y no en otras carreras de esta temporada?. Si, ya se que fue intervenido del síndrome compartimental y que se perdió dos carreras, pero ese empuje y el no arrugarse ante el líder del campeonato, me parece estupendo pero quizá un poco tarde. Con Márquez fuera de carrera Dani era la única baza de Honda para tener relevancia en el circuito aragonés. Cierto es que había perdido cierto crédito con la cúpula de la marca de las alas, sobre todo cuando decide operarse después de la disputa de la primera carrera en Catar pudiendo haberlo hecho durante la pretemporada. Algo que muy pocos entendieron, yo entre ellos. Con esta de dos mil quince son nueve temporadas como piloto oficial y el título se le resiste y que yo recuerde, pocos pilotos han estado tanto tiempo en esa situación de privilegio sin haber conseguido un entorchado mundial. El final de temporada está cerca y hay que dejar bien alto el pabellón de cara al futuro. No quiero que se me malimterprete y nada ni nadie puede enturbiar la actuación impresionante de Dani en Motorland. Espero que la hazaña de hoy sirva de revulsivo para las cuatro carreras que faltan por disputar y que nos haga disfrutar como lo hemos hecho hoy por tierras aragonesas.
Pero el principal protagonista de la prueba de Alcañiz ha sido Jorge Lorenzo. Seis victorias, con la de Motorland, avalan su trayectoria esta temporada y además con la superioridad y control del pasado domingo. Desde el inicio se marchó y fue distanciándose paulatinamente hasta tener una ventaja superior a los tres segundos y así hasta el final. Carrera típica de Jorge cuando no le molesta el casco o alguna que otra cosa  y tiene todos los pelos de la burra en la mano. Pero, además de la victoria,  le ha robado a Valentino nueve valiosos puntos en la provisional. Ahora son catorce a falta de cuatro carreras y todo puede pasar. Hoy Jorge debe haber cogido moral para afrontar la ronda asiática con plenitud de facultades. Hoy Dani le ha hecho un favor importante y así lo reconocía con ese abrazo en el corralito.
He querido dejar a Márquez para el final. Cuando todos creíamos que había aprendido la lección de esperar a que la temperatura fuera la buena, a estudiar concienzudamente al contrario y esperar el momento idóneo para rebasarlo, resulta que ha vuelto a caer el error de otras veces y precipitarse. Esto le ha llevado al suelo y de esta forma anotarse el quinto cero de la temporada. Este año está ya perdido. Hay que tomar nota de los errores y el de hoy creo que ya lo tenía anotado de otras ocasiones en su disco duro particular. Marc ha reconocido su fiasco y así lo ha hecho públicamente, al mismo tiempo que pedía disculpas a su equipo. Hoy en Motorland no tenía presión, sus posibilidades de título prácticamente no existían, entonces, ¿por qué esa precipitación cuando Lorenzo se escapaba y quedaba aún un mundo para la conclusión de la carrera? Marc Márquez es un piloto joven pero con dos entorchados en su haber y determinados errores, en condiciones normales, no se pueden cometer.

domingo, 13 de septiembre de 2015

EN MISANO, MARC FUE EL MAS LISTO Y ROSSI MAS LIDER

Después del paréntesis veraniego, vuelvo a la carga. No he podido escribir este blog durante este tiempo por no tener los elementos técnicos adecuados en el lugar donde me recluí. Pelillos a la mar. Espero que los que me seguís sabréis perdonarme esta falta que creo que es leve. Gracias por vuestra comprensión.
Después de presenciar la carrera de Misano he de confesar que nunca había visto, desde que se instauró en el reglamento el apartado bandera a bandera, o flack to flack, para los más amantes de lo anglosajón,  que los pilotos entraran por dos veces por boxes para cambiar de moto. La primera vez porque llovía y la segunda porque estaba seco. Realmente increíble. Bueno todos no, porque el británico Bradley Smith se lo hizo todo de un tirón, de ahí que acabara segundo. 
En situaciones como esta de tanto parar y tanta pizarra, la estrategia cumple un papel fundamental. El más listo siempre, o casi siempre, se lleva el gato al agua y esta vez Marc y su equipo fueron los más listos de la clase. 
Ya antes de la primera parada, Lorenzo mandaba la carrera con una salida espectacular seguido por los de siempre, es decir, Márquez y Rossi. Las previsiones metereológicas apuntaban a que podría llover, precisamente a las catorce horas, justo cuando se da la salida a motogp. Y en verdad que se cumplieron, Cuando se llevaban unas pocas vueltas disputadas, la pista se mojó y los pilotos comienzan a entrar en el pit line para cambiar de moto. El trío de cabeza, como si hubieran recibido una orden suprema, inician el camino de su garaje los tres a la vez, cuando se había cumplido la sexta vuelta. Salto de rana y sobre la segunda moto. Marc ocupa la primera plaza pero pronto cede, casi con una reverencia el paso a sus dos máximos contrincantes. Estaba claro que el de Honda no tenía prisa esta vez. Ya aprendió esa lección de que no hay que precipitarse y estudiar al contrario es muy importante.
Rodar y rodar, la lluvia que cesa,  el asfalto que se seca y todos menos uno con gomas de lluvia y todavía un mundo por correr, casi diez giros. Márquez, siempre muy observador, ve que los neumáticos de los dos de Yamaha se van deteriorando a marchas forzadas y a una orden de su equipo entra para cambiar a otra moto con ruedas lisas. Sin embargo, tanto Valentino como Jorge hacen caso omiso a las indicaciones que les transmitían desde el equipo a través de la pizarra y continúan con la moto de agua. La situación se les hace insostenible, el equipo insiste e insiste y por fin toman el camino del cambio. A todo esto Marc ya se les había escapado.
La única obsesión de Jorge era Valentino. Tenía que hacer lo imposible por reducir la diferencia de puntos en la provisional. Todo esto le generó un estrés añadido y cuando solamente llevaba una vuelta, el mallorquín se va al suelo, seguramente por no tener el neumático la temperatura adecuada. Afortunadamente, a pesar de que la caída fue dura, no le paso nada, pero el mundo se le vino encima. Por muy pocos puntos que cogiera su compañero de equipo, la ventaja se incrementaría, cuando ya faltan únicamente cinco carreras para la conclusión del campeonato y ya va siendo tiempo de hacer cuentas. 
Valentino, por su parte, viendo a su compañero en el suelo, echó mano de experiencia y se dedicó a no arriesgar absolutamente nada, limitándose a entrar en meta en el quinto lugar. Su público quería una victoria, o por lo menos verlo en el cajón, pero era mejor tener todo atado y bien atado y ser más líder. Está claro que el italiano busca la décima como si le fuera la vida en ello.
La estrategia correcta dio la victoria a Marc. Esta vez su equipo si hizo bien los deberes, no como en Japón hace dos años. Este año no va a ser campeón, pero ese pasito atrás no cabe duda que le está dando una serenidad y una sabiduría extraordinarias. Saber ir deprisa, ya sabe. Ahora está aprendiendo otras cosas en esas situaciones atípicas, como esta carrera disputada cerca del mar Adriático. El ha protagonizado la cara de la moneda, mientras que la cruz ha sido para Lorenzo a unas alturas del campeonato, cuando menos, preocupantes. 
Jorge, con cinco victorias, es el que más veces ha pisado la parte más alta del cajón (cuatro respectivamente para Rossi y Márquez), pero la caída de hoy, primera de la temporada en carrera, junto con los dos problemas del casco, le han  han dejado a veintitrés puntos de Valentino. El italiano podrá administrar convenientemente esa diferencia y el español tendrá que arriesgar más de lo que es normal. Para las siguientes carreras tendrá que revisar bien el casco y controlar esa ansiedad que le produce el ver que su compañero de equipo se le va. Y eso si que no es soportable.
En el cajón, junto a Marc, Smith segundo y Redding tercero. No me digan que no es curioso.
Dentro de dos semanas en Motorland, Alcañiz, mas.